Los elevados impuestos y aranceles en Argentina hacen que los precios de celulares y notebooks sean hasta un 70% más altos que en países vecinos como Brasil, Chile y Colombia, impulsando la caída de ventas y los tours de compras en el exterior.
Entre los impuestos y aranceles de importación, los precios de celulares y notebooks en Argentina se encuentran significativamente por encima de los vigentes en países vecinos como Brasil, Chile y Colombia. Esta diferencia de precios no solo ha impactado la capacidad de consumo de la población, sino que también ha fomentado los tours de compras en el extranjero.
Caída en las ventas de productos electrónicos
Durante el primer semestre del año, las ventas de celulares y notebooks cayeron un 50% en Argentina. Según la Cámara de Distribuidores Mayoristas de Informática, Productores y Afines (Cadmipya), esta disminución no se debe únicamente a la baja en el poder adquisitivo, sino también a que los precios en el país superan entre un 60% y un 70% los de los principales países de la región. Las notebooks, por ejemplo, son un 70% más caras que en los países vecinos, mientras que los celulares cuestan un 60% más.
Comparativa de precios
El costo de una notebook en Argentina varía entre 330 mil pesos para modelos más básicos, como la EXO XR1, y hasta 4 millones de pesos para modelos de gama alta como la Lenovo Legion. En cuanto a los celulares, los precios oscilan entre 155 mil pesos para modelos más económicos, como el Lenova N10, y 3,7 millones de pesos para modelos de alta gama como el Samsung Fold. Las promociones con cuotas sin interés, en algunos casos, han ayudado a mantener la demanda en ciertos productos.
La carga impositiva en Argentina
Especialistas señalan que los elevados precios en Argentina se deben en gran parte a la fuerte carga impositiva y los aranceles de importación. En el país, los productos electrónicos están gravados con un 66% de impuestos, incluyendo un arancel de importación del 16%, el IVA del 10,5%, un IVA adicional del 10%, entre otros. En comparación, la presión impositiva en Brasil es del 55%, en Chile del 26,1% y en Colombia del 19%.
El gobierno argentino apuesta a que la reducción del impuesto PAIS, del 17,5% al 7,5%, contribuya a la baja de precios y al aumento del consumo. Sin embargo, no se esperan cambios en los aranceles aplicados a la importación.
(Grupo La Provincia)