Ideas precursoras de Von Henting, Mendelshon y la “Victimidad”.
(Por Marina Suárez, Técnica en criminalística y criminología)
Las Primeras ideas precursoras de las que habla Von Henting tienen que ver con las víctimas, que él las divide en resistentes y cooperadoras. Fundamentalmente porque va mas allá de la Victimología, que se limita a las relaciones entre individuos por hechos penales que lesionan simplemente la norma. Se refiere, por ejemplo, al caso de alta traición en que la víctima no es ser humano sino la propia comunidad.
El vocablo “Victimología” fue acuñado por el israelí Mendelshon, que venía trabajando estos temas desde los años ’40. Desde el principio, el investigador definió a la Victimología como la ciencia sobre víctimas y victimidad e indicó a este como concepto general, un fenómeno específico común que caracteriza todas las categorías de victimas cualquiera que sea la causa de su situación.
De esta manera La Victimología satisface por completo las necesidades de la sociedad y su definición como ciencia de las víctimas resulta ser la más adecuada. El concepto de víctima en Mendelshon adquiere un ámbito amplísimo, refiriéndola a la personalidad del individuo, en cuanto que esta y aquel se encuentren afectados por las consecuencias del sufrimiento debido a factores de origen muy diverso: físico, psíquico, político, social, así como por el ambiente natural o técnico.
“La Pareja penal”
Mendelshon menciona que la “Pareja Penal” se ve superada por los crímenes no convencionales, desde los que engendra el abuso de poder político, la corrupción, hasta la enorme cantidad de delitos económicos o el crimen organizado. La víctima en múltiples ocasiones no tiene buena idea de quien, concretamente la victimice. En ocasiones es todo un pueblo el victimizado. También es difícil hallar “la pareja penal” en hechos cometidos mediante técnicas modernas, por ejemplo mediante internet, donde los delitos se cometen en pocos segundos afectando a múltiples víctimas en diferentes lugares del mundo.
“Cifra negra” y delincuencia convencional.
El estudio de las víctimas implica un acercamiento directo a la “cifra negra” de la criminalidad convencional y permite observar buenas posibilidades sobre algunas otras ilicitudes penales no convencionales. La “cifra negra” es la cara oculta del lado silenciado y silencioso de la víctima, ya que existen varias conductas antisociales de relevancia penal que no son comunicadas.
Las razones que inhiben la denuncia de hechos penales tradicionales son las siguientes:
1.- El temor del victimizado a serlo nuevamente. Miedo al autor del delito.
2.- Por considerar que no es grave la conducta lesiva.
3.- No confiar en la justicia.
4.- Temor a perjudicar al autor porque es miembro de la familia.
5.- La pérdida de tiempo que implican la denuncia y los trámites judiciales.
6.- La Victima agredió al autor y se sabe tan responsable del delito como este.
7.- La denuncia la perjudica: violación, estafa, etc.
8.-La víctima no tiene pruebas o desconoce al autor.
9.-Para evitar ser victimizados nuevamente por la policía, peritos forenses, jueces.
10.- Por la presión familiar y social al ser identificada como victima de ciertos delitos que marginan y humillan.
Con todo lo mencionado vemos que es amplio el campo de la victimología, mucho para hacer y replantear en cuanto a la cantidad de víctimas que no denuncian por las razones antes mencionadas, lo cual no debería existir ya que todos tenemos derechos a ser respetados y a estar protegidos por nuestros gobernantes, actores de justicia, como así también los auxiliares de la justicia.
