Hondar por la cultura colectiva es introducirnos en lo más íntimo de una comunidad. La cocina de todos los días es un claro ejemplo de esa cultura. La gastronomía se mantiene viva y es el símbolo de la unión de tradiciones familiares que se recrean en comunión en torno a la mesa. Rescatarlas, preservarlas y divulgarlas es la tarea que realiza la asociación COMIDAS PIGUENSES de la localidad de Pigüe. Este grupo lleva la idea de revalorizar la cocina tradicional de las familias que poblaron esta región, con el fin de mantenerla en la historia para que en la memoria colectiva sean un ingrediente perdurable. Vigorizar aquello que los hace únicos como sociedad.
El martes 26 se realizó la presentación de las producciones en la cual los vecinos compartieron las distintas recetas rescatadas por las tradiciones familiares. Uno de los gestantes de esta iniciativa es Marcelo Champredonde, que junto al grupo Amicale Pigüe recrearon las recetas de origen Aveyrones que se conservaban en la memoria de los nietos de los fundadores. Con ingredientes comunes los procedimientos cambiaban según las familias, las preparaciones muchas veces con nombres similares terminaban siendo una variación de un plato en particular. Preparaciones como Papas Trufadas, Papas a la olla negra o Papas a la francesa se hicieron presente en la muestra. Con los mismos productos la diversidad de preparaciones es el singular motivo para que estos recolectores de recetas las archiven como tesoros. En los relatos predominaba la expresión la cual hacía referencia a sus abuelas, aquellas mujeres que mantenían la cultura traída desde sus lugares preservando las tradiciones de sus de orígenes y así mantener el legado de la mano de la gastronomía.
Valorizar aquello que los representa como Pigüenses es la función de todos los que forman esta red. El objetivo es mostrar que son una comunidad que tiene particularidades comunes a partir de esta mezcla de colectividades que forman la sociedad de Pigüe, con la impronta del primer grupo fundador que llegó desde Francia acarreando el sueño de un futuro. Entender como este contexto cultural llevo a la evolución de los platos de la cocina hogareña diaria. Reconstruir la identidad como Piguenses mestizos sin perder la impronta de un grupo inicial. Contribuir a valorizar construcción de una identidad multicultural con raíces Aveyronnais.
Ya con tres años de residencia en esta ciudad siento que mi familia y yo tenemos abiertas las puertas de esta hermosa comunidad que alberga y cobija gran cantidad de familias proveniente de otros lugares. Muchos traídos por sus condiciones laborarles, encuentran en Pigue un increíble lugar donde poder vivir. Sintiendo ser parte de una sociedad que mantiene vivo el espíritu de aquellos que la fundaron. A poco de mudarnos llevamos con nosotros un pedazo de esta cultura adoptiva que nos enseñó el valor de las heredadas culturales. Sentirme parte de esta comunidad es el legado que voy a llevar para trasmitirles a las nuevas generaciones de mi familia.
Hoy las receta se comparten, dejan de estar latiendo en lo íntimo del seno familiar y se muestran a todos, así cada uno que se sienta parte de esta gran familia Piguense, por adopción o por raíces las consideren propias .Esta en particular es la de una de las familia que colaboraron revivir aquellas comidas rememoraba los recuerdos de muchos. La receta de la Familia de Marlene Favre PAPAS TRUFADA. Agradezco a todos los organizadores de la propuesta COCINA PIGÜENSE por permitir acercar eta receta y a cada Pigüense que nos hizo sentir parte de la ciudad.