El 22/5, un estudio publicado en The Lancet advirtió que la hidroxicloroquina no solo no era beneficiosa contra el COVID-19 sino que acarreaba serios peligros de complicaciones cardíacas. En base a esto, la OMS prohibió ensayos que la investigaban como tratamiento al coronavirus y Francia prohibió su uso. Pero los datos tomados para realizar ese estudio están bajo un fuerte cuestionamiento. El uso del compuesto está politizado desde que Trump y Bolsonaro se volvieron sus mayores partidarios.
El gobierno francés ha escrito a la revista científica The Lancet solicitando una revisión de los datos utilizados en un estudio que pulbicó alertando sobre los peligrosos efectos secundarios de la hidroxicloroquina en los enfermos de COVID-19.
El artículo en cuestión condujo a que la Organización Mundial de la Salud (OMS) interrumpiese los ensayos clínicos de la hidroxicloroquina en varios países, puesto que encontró que el compuesto no solo no es beneficioso contra el coronavirus sino que podría aumentar el riesgo de morir por complicaciones cardíacas.
El uso de la hidroxicloroquina se volvió un tema politizado luego de que el presidente estadounidense, Donald Trump. destacara sus propiedades beneficiosas contra el COVID-19 en repetidas ocasiones y hasta revelara que lo toma de forma preventiva. Francia estuvo entre los países que prohibieron su uso para tratar enfermos de COVID-19 luego de que The Lancet publicara el estudio alertando sobre el riesgo de muerte. The Lancet ha tomado distancia del estudio ahora, admietiendo que este plantea «serias cuestiones científicas».
La publicación «alerta a los lectores sobre el hecho de que surgieron serias cuestiones científicas» sobre este estudio, actualmente bajo una auditoría promovida por sus propios autores, indicó The Lancet. Esta advertencia fue publicada el martes como una «expresión de preocupación», término empleado por las revistas científicas cuando un estudio plantea potencialmente un problema.
Luego de que un grupo de 140 científicos, investigadores y estadísticos, escribieran una carta abierta a The Lancet y a los autores del estudio, cuestionando la integridad de los resultados, el ministro de Salud de Francia, Olivier Veran, también se dirigió a la revista científica con preguntas sobre los datos analizados en el estudio, anunció este miércoles 3/6 la portavoz del gobierno francés, Sibeth Ndiaye.
Según Ndiaye, sin embargo, la decisión de Francia de suspender el uso del fármaco, que había sido promovido desde el principio por el médico francés Didier Raoult, estuvo basada en otros estudios además del publicado por The Lancet.
La investigación cuestionada fue publicada el 22/5 en base a los datos de más de 96.000 pacientes ingresados entre diciembre y abril en 671 hospitales en el mundo y compara la evolución de quienes recibieron el tratamiento y quienes no. La conclusión es que la hidroxicloroquina o la cloroquina (tomada con o sin antibióticos macrólidos), estuvo asociada con un riesgo mayor de muerte de entre el 33% y el 45%. El riesgo de sufrir una arritmia centricular aumentó con las mayores dosis del compuesto.
Los autores del estudio, liderados por Mandeep Mehra, director ejecutivo del Brigham and Women’s Hospital Center for Advanced Heart Disease, en Boston, defendieron sus resultados. Sin embargo, se han negado hasta el momento a compartir sus datos de base. La semana pasada, el equipo de investigación del estudio había corregido algunos de los datos pero dijo que el resultado seguía siendo el mismo. La compañía Surgisphere, que reunió los datos de base utilizados en el estudio, también defendió su trabajo.
(Urgente 24)