El ICL, que se utiliza para calcular las actualizaciones de los contratos firmados hasta el 18 de octubre de 2023, está atado a la inflación, que alcanzó el 276,2% interanual en el pasado mes de febrero.
La Ley de Alquileres vigente hasta el 18 de octubre de 2023 establecía que el contrato fuera de tres años con un ajuste anual actualizado por el Índice de Contratos de Locación (ICL), que está atado a la inflación. Con los altísimos valores de la suba del costo de vida que hubo a partir de diciembre, se calcula que los inquilinos que estén bajo este régimen y que deben actualizar sus alquileres en abril sufrirán un aumento de casi 200%, con lo que si alguien pagaba $ 100.000 mensuales comenzará a abonar cerca de $ 300.000.
El aumento interanual, según la última actualización del ICL, es del 196,7% al 1º de abril. Si el locatario paga un alquiler de $ 100.000, a partir de abril con el ajuste deberá abonar $ 296.703, mientras que el que paga $200.000 pasará a abonar $ 593.407 por mes.
Para este cálculo, propietarios e inquilinos deben consultar el ICL que publica el Banco Central de la República Argentina (BCRA) en su sitio oficial. Se trata de un indicador que contempla en partes iguales la variación de la inflación (de acuerdo con el IPC que mide el Indec) y los salarios, según la remuneración promedio de los trabajadores estables (Ripte). El incremento de la inflación interanual, que fue del 276,2% en febrero de 2024, impactó directamente en el porcentaje de actualización. (DIB) MM