Los profesionales continúan en estado de alerta por los bajos valores prestacionales que ofrecen las obras sociales y medicinas prepagas.
El Colegio de Kinesiólogos de la Provincia de Buenos Aires (CoKiBA) informó a través de un comunicado que “continúa en estado de alerta por los bajos valores prestacionales que ofrecen las obras sociales y medicinas prepagas a los kinesiólogos”. Ante esa situación, se dispuso la interrupción de la prestación a los afiliados de la prepaga Swiss Medical S.A., como se hizo en otras oportunidades, en defensa de los derechos de los profesionales matriculados.
Desde el Colegio indicaron que “muchas de las obras sociales aún no llegan a pagar el mínimo referencial propuesto por la entidad que los agrupa”, por ese motivo se encuentran en continuas negociaciones para poder aumentar ese monto y que los kinesiólogos de la provincia puedan cobrar un valor digno por el desarrollo de sus tareas.
Vale recordar que al igual que lo sucedido el mes pasado con la suspensión de IOMA, Axis kinésica S.A. (para la atención de los afiliados de Galeno, Osecac, AMEBPBA) y Prevención Salud, el Colegio de kinesiólogos resolvió suspender la prestación de los servicios profesionales a los afiliados a una de las principales prepagas que tiene el país, Swiss Medical S.A.
En el comunicado indicaron que “actualmente Swiss Medical S.A. está pagando alrededor de $2.000 cada sesión de kinesiología, un valor muy bajo teniendo en cuenta que la prepaga aumentó entre enero, febrero y marzo casi un 90% el valor a sus afiliados y eso lamentablemente no se ve ni por lejos reflejado en el valor que les paga a los kinesiólogos”.
“Los valores prestacionales, que no cubren los costos mínimos para sostener un consultorio abierto que paga alquileres, secretarias, servicios públicos, tasas municipales y provinciales, insumos, aparatología, etc., hacen inviable que un kinesiólogo pueda sostener el nivel prestacional”, explicaron las autoridades de la entidad. (DIB) ACR