El 30 de noviembre se celebra el “Día Nacional del Mate”, lo que implica un merecido reconocimiento a una infusión profundamente arraigada en las costumbres y tradiciones de nuestro país. Es más, el hábito de matear es incluso previo a la colonización, ya que fueron los aborígenes guaraníes quienes introdujeron al “hombre blanco” en el consumo de la yerba mate.
Tomar mate implica mucho más que beber una infusión. Tomar mate es un gesto de amistad, de cordialidad; un sinónimo de encuentro que trasciende edades y estratos sociales. Además, gracias a sus reconocidas propiedades antioxidantes y energizantes, tomar mate también implica incorporar al cuerpo una serie de beneficios para la salud. Científicos argentinos y de otras partes del mundo cuentan con trabajos que destacan las virtudes del mate. Y muchos de ellos ya están investigando de qué manera se puede aprovechar sus propiedades en el desarrollo de alimentos funcionales y también en planes nutricionales que potencien sus efectos benéficos.
Fue precisamente esta combinación de valores sociales, culturales y saludables la que llevó al Congreso de la Nación a sancionar el año pasado la Ley 27.117 y disponer que el día 30 de noviembre de cada año se celebre el “Día Nacional del Mate”, en conmemoración del nacimiento del caudillo Andrés Guacurarí y Artigas, más conocido como “Andresito”. De familia guaraní, “Andresito” nació el 30 de noviembre de 1.778 en Santo Tomé (Corrientes) y gobernó la denominada Provincia Grande de las Misiones.
La norma fue publicada en el Boletín Oficial en febrero de 2015, por lo cual el próximo lunes será la primera vez que celebraremos el día de nuestro fiel compañero de jornada. Y este no es un dato menor, ya que mediante esa legislación en todos los eventos y actividades oficiales de índole cultural, se promocionará el consumo de mate y por supuesto, también se hará hincapié en la bebida como representativa de las tradiciones nacionales.
Una infusión muy saludable
En la Argentina se consumen alrededor de 256 millones de kilos de yerba mate, lo que implica un consumo anual per cápita de unos 6,4 kilos. La yerba mate está presente en más del 90% de los hogares y su consumo, sobre bajo la forma de mate tradicional, aporta al organismo gran cantidad polifenoles, vitaminas del complejo B, potasio, magnesio y xantinas. Los polifenoles actúan como un poderoso antioxidante, que ayudan a aumentar las defensas y a disminuir el envejecimiento celular.