(Por Prof. Fernando “Cocó” Maineri)
Muy sabido y estudiado está que el fútbol es un FENOMENO DE MASAS.
El fútbol es para algunos un juego y para otros una forma de vida. Hay quien lo usa como un negocio o lo sigue como ideología.
Llega a considerarse una pasión e incluso representa una religión. Forma parte del mundo actual, de la sociedad de masas que todo lo envuelve.
El fútbol es universidad de la vida, nos prepara para todo, en todos los ámbitos de la misma. Nos crea una disciplina, nos enseña respeto, el juego limpio, la importancia de la entrega, de la lealtad, sensibilidad y saca a la luz nuestro carácter que se va moldeando dentro y fuera de la cancha.
Lamentablemente en el mundo actual este concepto tan lindo y sagrado como el deporte es salud, es vida. Es un juego que está cambiando de rumbo.
En el mundo de los negocios, donde nada se hace sin obtener un beneficio económico, todo cambia.
Es por eso el titulo inicial, futbol mundial y ¿deporte? Los valores deportivos han sido sustituidos por criterios mercantiles, en un deporte donde la influencia de agentes externos al mismo adquirió mayor importancia que los propios protagonistas principales, llámese empresarios, representantes, políticos, medios de comunicación, etc. donde han cambiado los fines de tan maravilloso deporte. Y los VERDADEROS responsables, artífices del juego, LOS FUTBOLISTAS, pasaron a ser un producto para comerciar. Los modernos gladiadores que entretienen al pueblo.
Y el único que sufre es el aficionado, donde nada puede hacer, donde su pasión, su corazón, su vida sigue los colores de un equipo, los jugadores cambian de club, los empresarios acumulan millones, y se utiliza para malversación de fondos.
Pasó a ser un negocio entre empresarios, dirigentes, políticos, medios de comunicación para entretener al pueblo, pendiente de un resultado, del partido, muy alejado de la realidad del país.
Los medios de comunicación y la política constituyen la realidad, gracias a la gran repercusión social que este juego tiene.
Podemos enumerar algunos aspectos que hacen al fútbol como medio de manipulación masiva:
El sentir del pueblo: más en nuestra sociedad, donde nuestra esencia, idiosincrasia, cultura, pasa por ser un país futbolero.
Sociología: es utilizado el futbol como un elemento social importantísimo para la manipulación de masas, un fenómeno verdaderamente social, es ahí donde la persona manifiesta su ser, su sentimiento, sus angustias, su ilusión, esperanza y a veces un sueño, un modo de vida.
Economía del fútbol: pasó a ser un lugar ideal para negocios multimillonarios, malversación de fondos y en algunos casos la salvación económica particular y familiar.
Medios de comunicación: atentos al mercado, intereses económicos en juego, halagos y criticas según conveniencia o un resultado. Los derechos de televisación y comercialización de eventos e imágenes mueven fortunas.
Política: siempre mezclada en el medio como elemento de poder, para entretener, tener controlada a la sociedad y muchas veces ocultar la realidad de un país.
Los intereses económicos, equipos empresarios están por sobre los valores deportivos.
Los jugadores fueron y serán la materia prima de este deporte, la esencia del mismo, la razón de ser, y más aún en países subdesarrollados el fútbol como una salida, una vía de escape a otra vida mejor.
Un chico en el club, es un chico menos en la calle.
Ojalá el fútbol vuelva a ser educación, formación de la personalidad, respeto por el otro, igualdad de oportunidades para todos, cuidado de la salud…una forma, un estilo de vida, donde solo ganar (deportiva y económicamente) no sea el único resultado.
