Perder peso con salud no consiste en pasar hambre. Mucho más importante que cuantos kilos perdés, es como losperdés. Debes evitar cualquier estrategia que afecte a tu salud, rendimiento o estado de forma física. Los factores claves como una buena y equilibrada alimentación, evitar malos hábitos, vicios y un entrenamiento bien dirigido para que utilices los sistemas energéticos adecuados son imprescindibles.
Resulta casi imposible perder peso, mantener la forma, sin actividad física. Se trata de quemar más calorías de las que ingieres, y si no te mueves, apenas quemarás calorías, por lo que para perder peso debes seguir una dieta tan restrictiva que atenta contra tu salud. Basta con una hora de ejercicio físico 3 veces por semana para empezar a disfrutar de los beneficios de la actividad física. Cualquier tipo de ejercicio físico es beneficioso para quemar calorías, pero conocer algunos conceptos sobre cómo funciona tu metabolismo, o una persona capacitada que te oriente, va a ayudar a regular tu esfuerzo.
Cuando hacemos ejercicio físico aeróbico, el organismo en primer término obtiene la energía a través de la oxidación de la glucosa (glucolisis), para posteriormente continuar con la obtención de energía a través de la oxidación de los ácidos grasos libres provenientes de la degradación de las reservas de triglicéridos (lipolisis) Este proceso depende de la duración e intensidad del ejercicio.
En los ejercicios de moderada a alta intensidad producen una elevación del metabolismo mayor que un ejercicio de poca intensidad. Por eso se le da más importancia a las calorías consumidas (que van en función de la duración e intensidad) que al tiempo de entrenamiento o distancia recorrida.
Si estás empezando a entrenar para perder peso, el trabajo cardiovascular debe constituir la base de tu entrenamiento. Aunque puede resultar aburrido. Un sistema de entrenamiento que combine ejercicios de fuerza-resistencia en los que se movilizan grandes grupos musculares, que eleven tu frecuencia cardiaca, será aúnmás eficiente, divertido y eficaz. Al trabajo cardiovascular, tonificarás tus músculos, por lo que no solo produce un gasto energético durante la realización de los ejercicios, sino que también se producirá un consumo calórico post-ejercicio considerable, ayudando a elevar tu metabolismo y consiguiendo un consumo calórico total tan importante como una hora de trabajo cardio.
El trabajo de alta intensidad, como el que representan las contracciones musculares en el trabajo de fuerza, además de mejorar el tono muscular, tienen el gran efecto de aumentar considerablemente el metabolismo. Si trabajás tus músculos estarás quemando calorías también cuando descansás. Durante una sesión de fuerza no se queman tantas calorías como en una sesión cardiovascular intensa, pero posteriormente se produce un consumo calórico postejercicio que ayuda significativamente a la oxidación de los depósitos de grasa.
Recordando siempre que antes de dar inicio a un trabajo físico, de control de peso ointensidad, es aconsejable realizar los estudios previos médicos correspondientes.