Si eres como la mayoría de los emprendedores, iniciaste un negocio porque no querías trabajar para nadie más. Pero en algún punto, la realidad te alcanzó. Tu nuevo jefe te hace trabajar todo el día y pronto descubres que eres aún peor que tu jefe pasado.
¿Pero y cómo consiguen los emprendedores tener un mejor balance vida-trabajo y aun así alcanzar sus metas? En una sola palabra: enfocándose.
Steve Jobs decía que el enfoque no es decidir qué hacer, sino qué no hacer. Las personas suelen concordar en que estrechar el propio enfoque puede ser muy útil, pero pocos saben hacerlo. Esto se debe a que muchas veces no están claros sobre cómo enfocarse en un nivel práctico.
Te compartimos seis pasos que te ayudarán a enfocarte estratégicamente en lo que es más crítico para tu negocio. También te ayudará a lograr más y trabajar menos:
- Monetiza tu lista de pendientes
Determina el valor financiero de completar cada tarea de tu lista; es decir, ponle a cada pendiente un valor en pesos. Por ejemplo, si llamar a tu cliente número uno puede generar $1 millón de pesos en ventas anuales, escribe: Llamarle a ‘Pedro’ (1 millón).
- Organiza tu listado en orden descendiente
Así de simple; acomoda tus pendientes de acuerdo a su valor en pesos, de más a menos.
- Divide tu listado
Dibuja una línea en la mitad de tu listado que separe las tareas más importantes de las menos.
- Usa cuatro días a la semana en trabajar en el 50 por ciento más importante
Enfócate completamente en el primer asunto y termínalo por completo antes de pasar al siguiente. Si descubres que no puedes terminar con él hasta que alguien más haga su parte, entonces sigue hacia el siguiente pendiente en tu listado.
- Usa un día a la semana para completar el otro 50 por ciento
Al forzarte a trabajar en las tareas menos importantes un solo día, quizá no consigas terminarlas y algunas de ellas permanezcan ahí por semanas. Esto es algo normal que suceda, pero te permitirá enfocarte en lo realmente importante.
- Re evalúa tu listado cada semana
Elimina las tareas que se hicieron obsoletas. Si conservas los pendientes que no tienen un objetivo definido por semanas, entonces descubrirás lo poco importantes que son. Sería más fácil eliminar estas tareas desde el principio, pero probablemente te resulte difícil, por lo que usar esta estrategia te permitirá ignorarlas con el tiempo.
Si tienes cientos de oportunidades en tu listado top, es probable que dejes al final tareas como arreglar el logotipo de tu negocio, asistir a una cita con alguien que te dará un consejo, o temas parecidos. El enfoque no es gratis; para tener buenos resultados trabajando menos, es probable que tengas que sacrificar algunas buenas oportunidades por atender las grandiosas.
Debes dedicar la mayoría de tu tiempo y energía en trabajar en las actividades que causan más impacto. Cuando haces estos pasos continuamente por un tiempo prolongado, notarás que tus ventas aumentan sustancialmente. Con más dinero en tu bolsillo, podrás contratar personal que haga tus pendientes menos importantes, mientras tú usas tu tiempo en atender los top.
La clave para enfocarte es ignorar tareas banales y duplicar el tiempo usado en las cosas que hacen las grandes diferencias. Si lo haces, poco a poco empezarás a querer más a tu nuevo jefe