(Por Prof. Fernando “Cocó” Maineri)
El músculo gastrocnemio, también llamado musculus gastrocnemius y popularmente GEMELOS, por estar separado en dos mitades, está situado en la región posterior de la pierna y es el musculo más superficial de la pantorrilla.
Algunos lo llamamos el segundo corazón del cuerpo humano, por la importancia que este tiene como una bomba impulsando la sangre desde la periferia al centro del cuerpo.
El gemelo en relación con el pie provoca la flexión plantar y la flexión de la pierna.
Este músculo es el motor principal en la propulsión de la marcha, aguantando grandes cargas. Es por eso que a la hora de practicar deporte es de gran ayuda al realizar un trabajo preventivo para el gastrocnemio mediante cargas excéntricas además de emplear técnicas de estiramiento.
Se encuentra sobre el musculo soleo y se extiende desde los cóndilos (las cabezas redondeadas que encajan el en el hueco para formar articulaciones) femorales hasta el tendón calcáneo.
El gemelo es un musculo biarticular ya que su trayecto atraviesa dos articulación, la de la rodilla y el tobillo.
Su función sobre la rodilla es estabilizar el fémur, para evitar que haya un desequilibrio hacia adelante en los movimientos de flexión. Mientras que sobre el tobillo actúa como un extensor del mismo con tendencia a la inversión.
Las lesiones musculares son frecuentes en deportistas por el uso excesivo del musculo y/o la no realización de los estiramientos correctos.
Las lesiones más comunes que pueden aparecer son:
Contracturas: alteración funcional, elevación de proteínas y enzimas. Aunque hay desestructuración muscular leve se considera un mecanismo de adaptación que una lesión verdadera.
Microrotura fibrilar y/o elongación: alteración de pocas fibras y poca lesión del tejido conectivo.
Rotura fibrilar: afectaciones de más fibras y más lesiones del tejido conectivo, con aparición de un hematoma.
Rotura muscular: rotura importante o desinserción completa. La funcionalidad de las fibras indemnes es del todo insuficiente.
La importancia de realizar estiramientos después del ejercicio físico es fundamental para los músculos, con ellos se reduce la tensión, se mejora la coordinación y favorece la circulación, además de prevenir lesiones.
Las lesiones más comunes son las sobrecargas. Es uno de los músculos con mayor sobrecarga de los corredores, en el caso de los de montaña, el musculo que más se carga es el cuádriceps y en los de asfalto el isquiotibial. Pero en ambos tipos de corredores se producen sobrecargas en el gemelo.
Es el músculo fundamental para el corredor, al correr estamos flexionando la rodilla y el pie continuamente. El gemelo es el encargado de elevar el talón al correr. Por ello está continuamente trabajando durante toda la carrera.
Los que suelen correr pisando con el metatarso, algo común entre los minimalistas, están haciéndolo continuamente con el gemelo acortado. Son personas con gemelos muy trabajados, pero tienen más riesgo de sobrecarga en el musculo.
El gemelo sufre roturas con facilidad. Suelen darse en el gemelo interno casi siempre, y es raro sufrir una rotura del externo, pero las hay. Cuando se produce una rotura en el gemelo, le corredor nota una sensación de pedrada en la zona afectada. Cuando ocurre en el soleo, la sensación es de impotencia funcional, notas que no puedes caminar.
Otra de las grandes lesiones del gemelo se da en la inserción, en el tendón de Aquiles. Es uno de los tendones que más tienden a lesionarse.
Como cuidar el gemelo:
Sobre todo a base de estiramientos y masajes frecuentes, con rodillos, manual, o fisioterapeuta. Es muy importante hacer ejercicios excéntricos para el gemelo. Se hacen elongando, generando la separación de los dos cabos-
Es un musculo sumamente importante en la bipedestación y marcha. Por lo que es necesario el cuidado, mantenimiento, elongación y fortalecimiento del mismo. Uno de los músculos de nuestra independencia, movernos libremente.
