(Por Lic. Magdalena Maineri)
Actualmente, vivimos en un mundo virtual y revolucionado donde las cosas suceden muy rápido. Ha cambiado mucho la forma de ver el mundo, como también han cambiado las relaciones amorosas. ¿Cómo saber si es amor o dependencia emocional? ¿Por qué se está en una relación? Si la respuesta es porque te resulta gratificante, estás construyendo y compartiendo tu vida con alguien, entonces podemos hablar de amor.
Ahora, si estás en una relación o buscás a alguien para evitar la soledad, o porque “es mejor estar con alguien” podemos hablar de dependencia emocional. Como dice el dicho, a veces, es mejor estar solo a estar mal acompañado.
Ahora bien, ¿Qué debemos saber de la dependencia emocional? En primer lugar, que es una respuesta a un trauma o herida emocional. Suele tener como principales características la vergüenza, el arrepentimiento, depresión y baja autoestima. La persona centra su atención en problemas, sentimientos y necesidades ajenas, generando como resultado que aparezca una extrema sensibilidad ante la crítica de un tercero, que desde afuera da su opinión, pero no es bien recibida por la persona. En este tipo de relaciones, se intenta complacer “a toda costa” a la otra persona, sin medir el riesgo o las consecuencias que puede causarle a nuestra psiquis y a nuestro cuerpo (porque a veces, el cuerpo es el que pasa factura).
Además, es probable que aparezca un sentimiento de absoluta responsabilidad por el otro, anulando así tus propias necesidades. Éste es uno de los factores más importantes, ya que la persona se descuida a sí misma, con tal de completar al otro. Es por esto, que dan todo lo que tienen, (incluso más), aunque duela hacerlo, porque el miedo al rechazo y al abandono pesa más que las conductas autodestructivas que se generan en éstas relaciones.
Aunque podamos generar en algún momento relaciones que creemos que nos están ayudando, pero en verdad generan más malestar que satisfacción, lo primordial a tener en cuenta, es que los patrones de conducta dependiente, pueden ser cambiados y sanados. No siempre se repiten las mismas conductas en distintas relaciones. Lo importante es detectarlas, y pedir ayuda para de a poco, empezar a sanar.
Ante cualquier inquietud, no dudes en escribirme para una atención virtual o presencial.
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Diplomada en psico-oncología.
