Este lunes, un apagón generalizado dejó sin suministro eléctrico a decenas de millones de personas en toda la península ibérica. España y Portugal se vieron especialmente afectados, mientras que en Francia también se reportaron cortes breves en la región vasca.
Al cierre de este boletín, cerca de la medianoche en España, el servicio comenzó a restablecerse de forma gradual en algunas zonas del país. Las causas del incidente aún no han sido confirmadas oficialmente.
Ante la falta de energía, se recomendó a la población usar los teléfonos móviles con moderación para preservar la batería y evitar la saturación de las redes de comunicación. En ausencia de lectores de tarjetas, las transacciones debieron hacerse en efectivo. Muchas personas realizaron sus compras en supermercados a oscuras, utilizando linternas o la luz del celular.
El transporte subterráneo fue interrumpido, por lo que se sugirió desplazarse a pie o en autobús. Los hospitales continuaron funcionando gracias a sistemas de emergencia con generadores.