El Virus del Papiloma Humano (VPH) puede tener consecuencias graves como el cáncer de cuello uterino. En esta jornada es primordial la detección temprana.
El 4 de marzo se conmemora el Día Mundial de Concientización sobre el Virus del Papiloma Humano (VPH), una fecha que busca sensibilizar a la población sobre esta infección viral común. El VPH afecta a mujeres y hombres y puede tener consecuencias graves, como el cáncer de cuello uterino, el tercer tipo de tumor más diagnosticado en mujeres en Argentina.
La amenaza del Virus del Papiloma Humano (VPH)
La Liga Argentina de Lucha contra el Cáncer (LALCEC) insta a la comunidad a tomar conciencia sobre la importancia de la prevención y la detección temprana. El coordinador médico de LALCEC, Carlos Silva, enfatizó que «la prevención siempre es el mayor aliado para evitar el cáncer y llegar a un diagnóstico temprano». Para ello, es fundamental realizar visitas regulares al médico y someterse a los estudios de rutina recomendados.
El VPH es altamente contagioso y se estima que 4 de cada 5 personas podrían contraer uno o varios tipos en algún momento de sus vidas. Aunque el correcto uso del preservativo reduce el riesgo de transmisión, no lo elimina por completo, ya que el virus puede alojarse en zonas no protegidas por el preservativo.
Existen alrededor de 200 tipos de VPH, de los cuales 40 afectan las zonas genital y anal, y se clasifican en bajo y alto riesgo oncogénico, siendo este último asociado con lesiones que pueden evolucionar hacia el cáncer. El cáncer de cuello uterino es el más común, pero el VPH también puede causar cáncer de ano, pene, vagina, vulva y orofaríngeos.
¿Cómo se puede prevenir?
Para prevenirlo, se recomienda a las mujeres realizarse un Papanicolaou (PAP) anual a partir de los 25 años, así como también el Test de VPH. La vacunación contra el VPH también es altamente recomendable, ya que reduce significativamente la incidencia y mortalidad por cáncer de cuello uterino.
En Argentina, la vacuna contra el VPH se incluyó en el calendario de vacunación en 2011, tanto para niñas como para niños a partir de los 11 años. Un estudio realizado en adolescentes vacunadas mostró que la eficacia de la vacuna es mayor al 93% para los genotipos 16 y 18, los más asociados con el cáncer de cuello uterino.
La Licenciada en Psicooncología, Fernanda Montaña, destacó la importancia de la detección temprana y el seguimiento médico adecuado en caso de un resultado positivo de VPH. «Es importante tener presente la importancia de la detección y el diagnóstico temprano y oportuno, para poder ser tratado a tiempo y así prevenir el cáncer cervicouterino. Allí la importancia, no sólo de realizar el test, sino de retirar los resultados y seguir las recomendaciones médicas. Que el temor o la vergüenza no impidan cuidar la salud.» También enfatizó la necesidad de incorporar hábitos de autocuidado y un vínculo amoroso con la propia salud, para evitar obstáculos emocionales en la prevención.
(Urgente 24)