Los chicos adoran que les lean historias, especialmente cuando se van a la cama. Pero ¿qué cuentos leerles? Te ofrecemos una selección de narraciones que atraparán la imaginación de tus hijos y los acompañarán en el mundo de los sueños.
Si tenés hijos chiquitos, ya sabés de qué se trata: cada vez que llega la noche, es el momento del cuento. Los chicos adoran las historias y les encanta dormirse con la voz de su papá o su mamá contándoles un cuento.
Pero ¿qué cuentos están buenos para leerles a tus hijos? Lo ideal es recurrir a historias que estimulen su imaginación, que los entretengan y emocionen, además de hacerlos soñar e inventar y, por qué no, quizás, en alguna medida, educarlos.
Se sabe que los cuentos cortos tienen múltiples beneficios para el desarrollo integral de los chicos, tanto a nivel cognitivo como emocional y social. Por eso es buena idea tener a mano un repertorio de historias para contarles por la noche, cuando se disponen a dormir.
– “El león y el ratón”: Un cuento clásico de Esopo, que narra la historia de un león que perdona la vida a un ratón, y luego recibe su ayuda cuando queda atrapado en una red. El mensaje de este cuento es que no hay que despreciar a nadie por su tamaño o su apariencia, y que la gratitud y la amistad son valores importantes.
– “El príncipe Catapulto”: Un cuento moderno y divertido, que narra las aventuras de un príncipe que quiere ser astronauta, y que construye una catapulta para lanzarse al espacio.
– “Aurora, la princesa que no conocía la luna”: Un cuento de fantasía, que narra la historia de una princesa que vive en un castillo rodeado de un bosque encantado, y que nunca ha visto la luna.
– “Juan Sin Miedo”: Un cuento de terror y de humor, que narra la historia de un joven que no le tiene miedo a nada, y que se enfrenta a fantasmas, brujas y vampiros.
– “La brujita Fuegoazul”: Narra la historia de una brujita que tiene el poder de crear fuego con las manos, y que cree que no es capaz de hacer hechizos, pero al final descubre que dentro de ella habita un poder que no conocía.
– “El gato que soñaba con alcanzar la luna”: ¡Otra historia sobre alguien que suspira por la luna! Este cuento es muy corto y melancólico, y seguramente dejará a tu chiquito o chiquita pensando en el gato soñador.
– “El ratón de campo y el ratón de ciudad”: Otra fábula de Esopo. Narra la historia de dos ratones que viven en ambientes diferentes, y que se visitan mutuamente. Como toda fábula, tiene moraleja: consiste en que la felicidad no depende de las riquezas o las comodidades, sino de la paz y la libertad.
– “La niña atrapamariposas”: Un cuento de valores y de enseñanzas, que narra la historia de una niña a la que le gusta coleccionar mariposas, y que aprende una lección sobre el respeto a la vida y a la naturaleza.
Estos son solo algunos ejemplos de cuentos cortos para dormir que podés leer a tus hijos antes de irse a la cama, pero hay muchos más.
Lo importante es que elijas cuentos que sean adecuados a la edad, los intereses y las necesidades de tus hijos, y que los leas con una voz suave, expresiva y cariñosa, creando un ambiente de tranquilidad, relajación y confianza, que favorezca su sueño y su bienestar.
(Grupo La Provincia)
