(Por Marina Suárez, Licenciada en Criminología)
Al comenzar este año 2023, empezó el juicio por el Caso de Fernando Báez Sosa; un joven que perdió la vida después de recibir muchos golpes de gran impacto, por los que se conoce hoy por 8 jóvenes de Zárate que algunos de ellos pertenecía a un Club de Rugby. Hago introducción mencionando este caso debido a que este artículo versa sobre este tema, noticia que muchos “profesionales” (dicen llamarse) son entrevistados para que puedan comentar acerca de ello y, específicamente, me refiero a aquellos que entiendo se preparan para abordar las ciencias forenses, (criminalística) o en la parte de conductas (criminología), psicología, entre otros que puedan aportar desde lo técnico científico en estos hechos.
Haciendo mención a esto, debo decir que cuando una persona se prepara para abordar estos temas, en mi opinión, debe remitirse a la pregunta concreta o tema por el cual fue solicitado desde su experticia, no es correcto fundar la respuesta refutando lo que otro colega dijo y hablar de que estas cosas suceden porque no hay profesionales comprometidos. Esta apreciación hace que las personas que escuchan, que no necesariamente deben estar preparados en la materia, simplemente quieren saber sobre un caso resonante, pierdan la confianza en la salud y en la justicia, y hace que las personas queden calladas ante ciertos acontecimientos porque temen que no haya profesionales preparados para atender su problema. No es adecuado generalizar ya que dentro de estas profesiones hay mucha gente comprometida y con muchos años de experiencia donde de alguna manera se les falta el respeto de todo lo que hacen día a día y sobre todo en silencio, en lo personal tengo muchos “maestros” que desde su humildad me han guiado y transmitido conocimientos para transitar mi camino en las ciencias forenses y específicamente en la Criminología, muchos de ellos son psicólogos, fiscales, abogados, que siempre están cien por ciento dedicado a cada persona que deben atender por algún problema, en capacitación constante y luchando para ser escuchados cuando hay que realizar cambios necesarios en el sistema o dentro de las instituciones, siempre perseverantes para poder atender adecuadamente a las personas que son vulneradas en sus derechos y muchos que tienen diferentes conflictos con la ley. En lo personal, hace varios años que vengo forjando mi camino, estudiando, preparándome para brindar lo mejor y las herramientas para quien tenga algún problema, poder dar a conocer temas que muchas veces son invisibilizados, y sobre todo mi mayor desafío es prevenir conductas disruptivas, para no llegar a grandes situaciones como las del caso mencionado, la prevención debe comenzar desde las primeras infancias, desde el hogar y acompañados por las instituciones que complementan la educación en las distintas etapas de socialización. Cada caso y cada tema es complejo porque hay un análisis más allá de lo que sucedió, nada sucede de un día para el otro por casualidad, las conclusiones siempre se fundamentan con una investigación completa desde la familia, el entorno, amigos, todas las relaciones interpersonales que me puedan indicar el porqué de determinadas conductas; refiriéndome desde mi experticia la Criminología (que para hacer un informe nos hemos preparado mucho en materias específicas dentro de las cuales esta psiquiatría, psicología social, criminología, delito, contexto social, delincuencia organizada, metodología de la investigación, entre otras).
En conclusión, creo que cuando los jóvenes llegan a estar intramuros (privados de la libertad, institución carcelaria), las instituciones anteriores fallaron, por lo tanto, hay que investigar el porqué, para saber determinar cuál es la raíz de la conducta que genero el conflicto, y poder proyectar todo lo referido a prevención para que esto no ocurra, y trabajar permanentemente en prevención de las violencias, en sus diferentes temas y manifestaciones.
En cuanto a la comunidad educativa hay muchos educadores comprometidos, pero que muchas veces, de acuerdo a los que he entrevistado, corren riesgo sus puestos de trabajo si hacen un informe, porque los superiores y la institución se vería afectada. Entonces es para pensar de qué manera poder ayudar a quienes luchan día a día para que los niños, niñas y adolescentes, sean cuidados y tengan una buena educación.
En base a todos los temas mencionados, son varias las cuestiones a investigar, analizar y determinar conclusiones para poder proyectar en cuanto a prevención o solución cuando ya un hecho ha sucedido.