La alopecia temporal es una de las principales consecuencias del Covid-19. Uno de cada cuatro pacientes que contrajo coronavirus sufre de pérdida del cabello a partir de los dos meses de habérsele diagnosticado la enfermedad.
La caída del pelo en exceso, conocida como alopecia, es un problema frecuente tanto en hombres como en mujeres, y una de las principales preocupaciones a lo largo de la vida de muchas personas. Y en ese sentido, la pandemia por Covid-19 ha acentuado este problema: uno de cada cuatro pacientes que contrajo coronavirus padeció o padecerá algún tipo de alopecia temporal.
La más frecuente es el efluvio telógeno, caracterizado por la pérdida de cabello activa de más de 100 pelos al día, que sucede 60 días después de haber tenido Covid (sobre todo aquellas personas que fueron sintomáticas, es decir, que presentaron fiebre o mal estado general) y que suele durar menos de 6 meses. Esta patología fue detectada en el 75 por ciento de los casos de los pacientes que sufrieron alopecia temporal post-Covid 19.
También, en menor medida, se han reportado casos de reagudización o aparición de alopecia areata -de tipo autoinmune- o también la aparición de alopecia androgenética subyacente en aquellos pacientes predispuestos genéticamente a la calvicie.
Además, distintos pacientes que han perdido el gusto, el olfato y que han padecido cefaleas han reportado presencia de dolor en el cuero cabelludo, denominado tricodinia, afección que puede darse con o sin pérdida de cabello.
“Es mucho más frecuente tener caída del pelo con el Covid. Después de dos meses de haberse manifestado la enfermedad, muchos pacientes tienen una caída del pelo importante de alrededor de 100, 200 pelos por día. Esto se debe a diversos factores relacionados con la infección, sobre todo a la respuesta inflamatoria asociada a la infección por Covid, falta de aporte de oxígeno en el folículo piloso y uso de algunas drogas específicas“, manifestó la dermatóloga Cecilia Navarro Tuculet, a cargo del área de Tricología en el Hospital Italiano de la Ciudad de Buenos Aires y asesora de Laboratorios Sidus en la marca Ducray.
Es importante que quienes padecen esta dolencia sepan a quién acudir para procedimientos de sostén y recuperación del cabello en los tiempos estipulados. Existen varias opciones de tratamiento tópico- (lociones) y por vía oral (suplementos nutricionales), que apuntan a un mejor aporte de nutrientes, microcirculación y vitalidad del folículo piloso.
Las lociones son las más utilizadas: permiten detener la caída completa del cabello en el 66 por ciento de los casos después de 3 meses de aplicación diaria, y producir una regeneración visible después de 6 meses. Los suplementos nutricionales, que suelen ser más utilizados en mujeres que en hombres, pueden ser una solución más que eficaz. La combinación de aminoácidos de azufre (cisteína y metionina), vitaminas B6, B8, E, PP y hierro puede tener resultados óptimos después de un trimestre de ingesta diaria.
En cuanto a otros cuidados, los dermatólogos recomiendan tener una alimentación balanceada y saludable. “La caída de cabello post Covid es inevitable, ya que es un proceso secundario a la potente inflamación generada por la infección viral. Lo importante es que la caída es autolimitada, y el cabello se recupera por completo. La higiene diaria del cabello es fundamental; si bien genera angustia en los pacientes porque en el proceso de lavado sienten que pierden más pelo, es necesaria para no asociar otras dolencias que pueden impedir el crecimiento normal del cabello a posteriori”, cerró Navarro Tuculet.