(Por Prof. Fernando “Cocó” Maineri)
Son muy frecuentes y pueden comprometer más de un músculo. El dolor muscular puede involucrar ligamentos, tendones y fascia. La fascia son tejidos blandos que conectan los músculos, huesos y órganos. El dolor muscular, a menudo, está relacionado con tensión, sobrecarga o lesión muscular por algún ejercicio, o trabajo demasiado exigente, intensidad no acorde a la persona. El dolor muscular tiende a comprometer músculos específicos, comienza durante o justo después de la actividad. Comúnmente la actividad que provoca ese dolor es bastante obvia y perceptible.
El dolor muscular también puede ser un signo de enfermedades que afectan al cuerpo, sus causas más comunes son : traumatismos, esguinces, distención muscular, sobrecargas muscular, velocidad de ejecución, mucha frecuencia con tensión, estrés, y poco descanso.
La manera de disminuir dolores musculares:
Realizar entrada en calor antes comenzar una actividad física y su correspondiente vuelta a la calma.
Hidratarse antes, durante y después de la actividad.
Realizar ejercicios de estiramientos muscular, movilidad articular y relajación.
Iniciar la actividad de forma progresiva y finalizar de igual manera.
Evitar actividades de alto impacto, cargas excesivas, cuando hay dolor.
Descansar bien y reducir el estrés.
Entrenar, realizar actividad física SIN DOLOR.
El dolor muscular, también llamado mialgia, es un posible efecto secundario de alguna otra enfermedad, se puede sentir dolor en un área específica del cuerpo o que duele todo el cuerpo. Algunos dolores musculares son levemente molestos, mientras que otros pueden ser intensos. Pueden durar poco tiempo o ser constantes durante mucho tiempo.
El dolor muscular puede afectar la calidad de vida de una persona y hacer que otros síntomas efectos secundarios parezcan peores.
Siempre es conveniente la visita y control médico periódico, más aun si a los síntomas de dolor muscular se le suma: fiebre. Debilidad muscular. Dolor alrededor del tórax o cintura.
Incontinencia urinaria. Confusión. Rigidez en el cuello. Entumecimiento y cosquilleo en alguna parte del cuerpo.
Algunos métodos de autocuidado y apoyo que pueden ayudar a controlar el dolor muscular:
Masajes: un masajista con experiencia en masaje terapéutico puede ayudar a aliviar el dolor muscular.
Fisioterapia: un fisioterapeuta puede tratar los problemas musculares y enseñar a aliviar el dolor con ejercicios o dispositivos simples.
Ejercicio: realizar ejercicios suaves, junto con elongación y fortalecimiento puede ayudar a aflojar los músculos y aumentar el flujo sanguíneo hacia los músculos.
Calor-Frio: las compresas calientes o frías, las almohadillas térmicas o las bolsas de frio pueden ayudar a reducir las molestias de dolor muscular.
Técnicas de relajación: los ejercicios de respiración suave o meditación pueden aumentar la relajación y reducir la tensión muscular, y esto a disminuir el dolor muscular.
De todas estas opciones ver cuál es la mejor opción para reducir y tratar los dolores musculares.