La reciente decisión del gobierno nacional de suspender los subsidios a la energía eléctrica suministrada a las empresas, a partir de la publicación de la Resolución 131/21, propiciará un aumentó de los costos de al menos del 41% durante la temporada de elaboración de vinos.
Así lo demostró un estudio realizado por el área económica de Coninagro en el que se estima que el impacto de esta medida generaría un incremento de 41% en el costo de la temporada de elaboración para aquellos establecimientos que igualan o superan los 300 KW de potencia.
Se calcula que los nuevos valores tarifarios elevan el costo de la participación de la energía para diversos sectores productivos. Por ejemplo, en la elaboración de un vino tinto, representan un incremento de entre el 18% y el 21%.
Luego de conocer la publicación de la Resolución 131/21 referente a la quita de subsidios nacionales, la medida derivo en incrementos en el costo de la energía eléctrica para los GUDI (Grandes Usuarios en Distribución), con diversos impactos en las economías regionales, que “involucraría a muchas de nuestras cooperativas a lo largo del país”, asegura Coninagro.
“Estamos seguros de que estas medidas tienen un impacto en el desarrollo de nuestras economías regionales, con aumento de costos y en los índices de inflación, que va en contra de proyectos que promuevan la generación de empleo, alienten la producción y brindan un marco de previsibilidad”, aseguró la entidad ruralista.
En ese sentido, Carlos Iannizzotto, presidente de Coninagro, aseguró: “Entendemos que se debe revisar el incremento tarifario considerado, en función de las particularidades de cada sector y de cada economía regional. Creemos que la aplicación de los incrementos debe ser progresiva”.
Iannizzotto consideró asimismo que: “Es necesario fortalecer las líneas de financiamiento de acuerdo a cada realidad productiva que permita una mayor eficiencia en el uso de la energía eléctrica junto con políticas estables y permanentes en materia de energías renovables para autoconsumo”.
Al tiempo que reclamó “políticas que permitan recomponer las cuentas fiscales del Estado. No obstante, estas acciones deben ser consensuadas con el sector privado, de manera de elaborar un plan de acción energético a mediano y largo plazo”.
Según datos suministrados por la CAR (Consejo Asesor Regional) de Cuyo, junto a la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Acovi) en Mendoza, los recientes incrementos nacionales y provinciales, impactan considerablemente en las cuentas de las bodegas elaboradoras.
Ese impacto alcanza también a los costos de los productores que elaboran a maquila, al afectarse la cantidad de litros que recibirían por la uva ingresada. Por ejemplo, se calcula que en la elaboración de un vino tinto, los incrementos tarifarios representan un aumento de los costos que oscila entre el 18% y el 21%.
Aumento Nacional
A nivel nacional, la quita de subsidios implicó un incremento de 63% en los cargos para los usuarios con un consumo de potencia de 300 KW (GUDI), o más y también impactó en los usuarios con una potencia menor, incrementando sus cargos variables en un 4% por aumento en el gravamen destinado al Fondo Nacional de Energía Eléctrica (FNNE).
Se debe tener en cuenta que, si bien esta medida afecta principalmente a las industrias grandes, del sector agropecuario, afecta también el sector comercial y de la construcción.
En ese sentido, Iannizzotto comenta que: “existen casos de cooperativas con un consumo de potencia bajo durante todo el año y que sólo superan los 300 KW durante dos o tres meses al año, que son los períodos de elaboración, por lo que también se ven impactados por esta medida en el momento de mayor consumo”.
A esto debe sumarse el impacto generado por la adecuación del Valor Agregado de Distribución (VAD) provincial que determinaría un incremento conjunto, nacional y provincial, de 78% en la temporada de elaboración respecto a la del año pasado.
(Noticias AgroPecuarias)