La soja de primera pasa por una situación muy comprometida tras la ola de calor en la región núcleo. Se necesitan al menos 50 mm en los próximos días.
Los pronósticos señalan la posibilidad de una recuperación hídrica importante, consigna el informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR)
En plena etapa de fructificación de la soja, la región núcleo sufrió intensas condiciones de desecación.
Las lluvias del 24 al 27 de enero solo alcanzaron a aliviar a una pequeña porción del centro y norte de la zona.
En esta semana se observó acartuchamiento de hojas, plantas estresadas, amarillamiento de hojas inferiores, pérdida de flores y vaneos de vainas. También hay ataques de arañuelas y trips, plagas características de años secos.
Los daños más importantes están en el E cordobés, SE de Santa Fe y en gran parte del N bonaerense. Se tratan de zonas que venían con mayores restricciones hídricas.
“Las plantas quedaron chicas, el número de nudos está lejos del óptimo y como el surco todavía no cerró, la pérdida de milímetros ha sido muy fuerte”, coinciden en explicar los técnicos.
La condición de lotes regular alcanza al 22% del área y ya hay un 8% que se considera en mala condición. Hay lotes cordobeses que arrancaron el periodo crítico, el llenado de granos casi sin reservas de humedad.
En Marcos Juárez, los técnicos dicen que “éstos últimos días de calor fueron muy críticos. Necesitamos urgente lluvias superiores a 50 mm”. Hay una situación muy comprometida tras la ola de calor.
“Hoy la soja de primera es un interrogante abierto”, resumen los técnicos de General Pinto. Y lo dicen porque allí como sucede en buena parte de la región, si hay una recuperación hídrica importante aún hay tiempo para que la situación mejore.
Los modelos muestran buenas posibilidades de acumulados importantes, ya que se esperan cuatro días de lluvias y tormentas.
Esto podría ser la respuesta a lo que el sector hoy está necesitando: obtener urgentemente el auxilio de acumulados mayores a los 50 mm. Pero si esto no sucede, será un punto de giro muy negativo para la producción de la región.
Los más afectados
En pleno llenado de granos con estrés hídrico y térmico se intensificaron las perdidas en las áreas más afectadas por la sequía.
Los lotes entre regulares y malas condiciones ascendieron a 350.000 has esta semana (25%). En el noreste bonaerense a la perdida por plantas sin espigas o con espigas chicas, ahora se agrega la de espigas sin llenar y granos más chicos.
En General Pinto los maíces para silo confirman pérdidas de rinde en torno del 30 al 50%
En San Antonio de Areco esperan un promedio de 50 a 60 qq/ha y habrá más lotes que no lleguen a cosecha.
En General Pinto los maíces para silo confirman pérdidas de rinde en torno del 30 al 50%. En el sudeste cordobés, como en Marcos Juárez, se espera una mayor pérdida de peso en el llenado de granos.
Tras las condiciones que pasaron los maíces esta semana estiman promedios de 90 a 95 qq/ha. Por el otro lado, en el centro sur santafesino, como en El Trébol, Cañada Rosquin y Bigand las últimas lluvias moderaron el impacto de la ola de calor.
Las reservas de agua alcanzarán para terminar el ciclo del cultivo en los mejores lotes y se espera superar los 100 qq/ha (Noticias AgroPecuarias).