La consultora McKinsey desde el 13 de abril hace un relevamiento. Surge como relevante que el 66 % de los hogares ha manifestado haber sufrido una caída de ingresos, el 43 % está preocupado por su trabajo y el 25 % es optimista con respecto a la recuperación económica. El Estudio fue realizado entre el 7 y 12 de abril sobre una muestra de 1000 personas en las principales donde se puso el objetivo. Por ej. en Suecia están aplicando lo que se llama “inmunidad colectiva”, está centrada en proteger las poblaciones más vulnerables, sin cuarentena, utilizando solamente distanciamiento para aplanar la curva. Se mantienen aspectos de la vida social y económica y, con el tiempo, desarrollar un grupo grande (60 %, 70 %) de personas para proteger la manada. Subyace detrás de este razonamiento que la solución a la pandemia (la vacuna) tardará tanto que no podrá soportar el crack económico que implica la cuarentena.
La realidad es que la crisis aprieta y los países tienden a abrir la cuarentena. Cuando la gente no sabía muy bien lo aceptaba, pero cuando el tiempo pasó, comenzó a ocupar la mente en la caída estrepitosa de la economía y la gente comienza a temer por su empleo, su estabilidad, por su salud mental, comienza a evaluar alguna mezcla de sanidad y economía, porque elegir una de ellas lleva a un camino sin salida.
¿Que se ha hecho hasta ahora? Se ha puesto el énfasis en la sanidad, con el criterio de que será más fácil volver a la normalidad económica que soportar los muertos. Se pretende evitar de esta manera la saturación del sistema de salud. Del otro lado es que la pandemia va durar tanto que el tema económico va a ser el punto crítico en el desarrollo de la crisis, por lo que no puede haber una cuarentena eterna, entonces la solución a la Sueca.
A esto se suma la negociación por la deuda, porque es una las condiciones necesarias para salir de la crisis remanente. Esto es importante porque sabido es la tendencia autóctona de echarle la culpa a otros de nuestros problemas.
De cualquier manera, es muy difícil hacer comparaciones, muchas de estas cosas dependen de la estructura social donde son aplicadas, como se suele decir: el mundo no existe .Existen lo que los sentidos nos dicen de él y, podríamos agregar, lo que los políticos piensan que es.
Lo concreto, y como un mero diagnóstico, es que solo hay parches desde la demanda que está concentrada en alimentos, básicamente.
Hay que solucionar el tema de la deuda, lo que implicará una negociación intensa, y después apuntar a desarrollar la oferta, o sea PYME.
Más allá de los planes del Estado Nacional, las administraciones municipales deben ponerse a la cabeza de la reconstrucción.