Un centenar de familias en el centro de la tormenta
Son más de 89 las familias que salieron sorteadas en abril y octubre del 2013 para los créditos hipotecarios del programa nacional PRO.CRE.AR para comprar el terreno y construir sus viviendas.
Pero el sueño se les diluye mientras intentan escapar de una encrucijada: les es imposible, en el corto plazo, acceder a terrenos tanto en el sector privado como en el público. En el primero por los altos valores inmobiliarios. En cuanto a los segundos, porque no existen terrenos fiscales aptos o los papeleos de nación a municipio se dilatarían en el tiempo. En el medio, los responsables políticos se lavan las manos. En miras al 2015 el ANSES, la oposición y los gobiernos municipal, provincial y nacional se dirimen una batalla política en la que quedan acorralados los beneficiarios.
La devaluación de diciembre y la inflación también meten la cola: el dinero que recibieron va perdiendo poder adquisitivo a pasos agigantados. “No es lo mismo lo que podías construir con 500.000 pesos hace seis meses, que lo que podés construir ahora”, ejemplifica uno de protagonistas, Lautaro Fulleda. Y, como si fuera poco, desde el Banco Hipotecario descartan la posibilidad de realizar alguna adecuación al dinero que perdieron para amortiguar la pérdida del poder adquisitivo.
Tras una serie de reuniones con el ANSES, con los concejales del FPV y con el intendente, el miércoles por la noche se reunieron los afectados, esta vez solos, para determinar los pasos a seguir en esta resistencia a que su ilusión de la casa propia quede rota.
Las reuniones y las idas y vueltas
“Aumentaron mucho los terrenos y estamos buscando terrenos fiscales o los que nos pueda dar el municipio para poder acceder”, resume así el objetivo de las reuniones, uno de los beneficiarios del programa nacional, Gustavo Ongaro.
Los damnificados son alrededor de 100 familias: 89 que accedieron a la línea de créditos de compra de terreno y construcción y alrededor de diez más que se sumaron a último momento. “Tenían la línea de la compra de terreno pero se les cayó la compra y se pasaron con nosotros a Terreno y Construcción. Se elevaron tanto los terrenos que no pudieron acceder”, aclara Gustavo Ongaro.
Ongaro explicó que los primeros que convocaron a los beneficiarios fue el Frente Para la Victoria y también tuvieron reuniones sucesivas con el intendente, el ANSES y el Banco de la Provincia para “ver cómo se puede resolver el problema. Nos estamos juntando todos los días para resolver el problema y seguir en la lucha”.
Si bien salieron sorteados, el dinero no lo tienen disponibles porque “te lo dan cuando llevas todos los papeles del terreno y cuando ya estás por construir. Desde el ANSES nos dijeron que nos iban a aguantar si presentábamos una prórroga hasta que salga algo del municipio. El FPV quería presentar un proyecto…Nosotros nos estamos viendo a todos los concejales para conseguir los terrenos. Desde el municipio nos dieron la solución del matadero”, agregó.
Los terrenos: el quid de la cuestión
El martes 18 de marzo 70 beneficiarios de PRO.CRE.AR se reunieron con el intendente en el Salón Blanco Municipal. Allí el jefe comunal de Nueve de Julio prometió poner a disposición 100 de los 230 terrenos que se lotearán en el predio del ex matadero. Según el mismo funcionario “estos lotes pueden acceder a todos los servicios, por lo que el municipio asumió el compromiso ante la Provincia de realizar la traza de los distintos servicios y de la calle”. Sin embargo, los vecinos no están conformes. Y tienen sus razones para ello. “El municipio nos dio la solución del matadero pero tenemos el problema de que el suelo está contaminado – explicó Ongaro – Y hay que hacerles muchos tratamientos para que sean aptos. Si se hace bien se puede rescatar y construir”, explicó así las idas y vueltas.
El relleno y la nivelación del terreno correspondería al municipio pero los propietarios deberían erogar fuertes sumas cada uno de ellos para que las viviendas que construyan allí tengan un tratamiento específico y toleren las características de ese suelo. “Como están contaminados, cada uno de nosotros tenemos que gastar alrededor de $30.000 pesos más para que quede apto”, explicó Yanina, una de las afectadas.
“Como el suelo tiene un alto poder de contaminación, para poder edificar tenemos que hacer unos cimientos especiales. No son cimientos normales. Deben usarse materiales especiales para que, el día de mañana, la humedad no entre en las paredes y la construcción no se venga abajo. Entonces la mayor parte del dinero que el Banco nos da para construir se nos va en los cimientos”, explicó así la negativa a conformarse con los terrenos del ex matadero Fátima.
Plan B: Los terrenos de La Trocha
Existen 183 terrenos en el sector de las vías de la ex Estación La Trocha, entre avenidas Compairé y Eva Perón, que son propiedad del gobierno Nacional y que estarían a disposición del ANSES. Sin embargo, los beneficiarios del programa PRO. CRE.AR aseguran que ese proyecto está destinado a otro grupo de personas que no cuentan ni con terrenos ni con casas y que poseen recibos de sueldo. “Esa es otra línea de urbanización y no corresponde al PRO.CRE.AR”, aclaró Fátima. “Por eso pedimos a Mauro Esteban (jefe de la UDAI 9 de Julio del ANSeS) que organice una reunión con Nación para pedir los terrenos que están después de ellos, pasando la Compairé”. Los beneficiarios aseguran que el agregado de nuevos terrenos en la zona de La Trocha es una opción posible si logran la gestión adecuada del organismo.
Saben que los tiempos burocráticos son muy laxos y para ello solicitaron una reunión con Nación para que agilice los trámites. “Mauro Esteban tendrá una reunión con Nación y existe la posibilidad que dos o tres de nosotros viajemos con él para explicar la situación y agilizar todos los trámites”, aseguró Fátima. “Y nos dijeron de la ANSES que en 15 días tendremos novedades.”, aseguró esperanzado otro de los implicados. “Tenemos que agotar todas las instancias”, agregó Ongaro.
Los beneficiarios aseguran que existen otros terrenos fiscales en la ciudad que esperan que se pongan a disposición del este programa. Para ello los concejales del FPV redactaron un proyecto de ordenanza en el cual exige al municipio que presente todos los terrenos fiscales aptos para vivienda, tanto los provinciales como los nacionales para que se loteen y se pongan a la venta “a precios accesibles” y “acordes al crédito hipotecario PRO.CRE.AR”.
Otra de las trabas para el acceso a los terrenos son los precios del mercado inmobiliario y las reglas de juego del negocio. “Si uno va a las inmobiliarias a plantearles que queres comprar un terreno para este plan te contestan que no.”, afirma una mujer. “Por ejemplo a mí y mi señora, una inmobiliaria nos pedía un 7% y terminamos arreglando en un 3%. Igual en tres meses eran 6 o 7 mil pesos. Era mucha plata que tenía que poner de mi bolsillo que la tenía calculada para la escrituración, para la hipoteca, para el arquitecto. Porque todo esa guita el banco no te la da. Para entrar en el plan tenes que contar con por lo menos con $ 50 a 60 mil pesos para empezar los trámites”, declara Lautaro Fulleda.
A la espera
Mientras los vecinos se reúnen y buscan todas las alternativas posibles para luchar contra reloj, esperan respuestas válidas de uno y otro lado. Saben que la tarea será titánica por las pujas políticas de por medio y la campaña que ya se siente en el aire. Las cien familias hoy están conscientes de que el acceso a una vivienda digna es un derecho inalienable y no están dispuestas a ceder lo que por derecho les pertenece.